Los caballos tienen reacciones muy diversas acorde a la personalidad de cada uno, pero lo que si podemos garantizar es que ante un susto saldrán corriendo, el miedo a todos los equinos lo obliga a correr sin pensar que es lo que les generó este sentimiento, sino que este tipo de análisis lo llevarán a cabo cuando se encuentren en un lugar que consideren seguro.
Los caballos son animales esplendidos, pero como hemos dicho en muchas ocasiones son terriblemente nerviosos, por lo que cualquier impulso o aparición a la que no estén acostumbrados los puede llevar a correr despavoridos, no hay que olvidar a los peligros a los que se enfrentan los caballos salvajes, los cuales son perseguidos por una gran serie de animales carnívoros, teniendo como única protección su velocidad al correr.
Por supuesto esta reacción es incontrolable, por lo que tenemos que entender cuando estemos trabajando entre equinos es que los caballos ante un miedo salgan corriendo, por supuesto el mayor de estos problemas es cuando el animal está siendo montado por un jinete inexperto, el cual no sabrá cómo reaccionar, cuando se vea arriba de una animal de cientos de kilos, el cual va corriendo como el viento, sin que haya nada que lo haga detener.
Lo mejor que se puede hacer es afianzarse bien a la silla, entender que la rienda no nos va a servir de mucho en ese momento, pero tampoco hay que soltarla, por el contario hay que pararse bien de los estribos y tratar con los brazos de tomar por el cuello al animal, suave, acariciarlo, y el caballo irá tranquilizándose, y frenando.