El caballo ucraniano, a pesar de ser una de las razas más poco conocidas resulta ser una de las más fascinantes que existen.
El caballo conocido como ucraniano cuenta con el tipo de sangre tibia y aunque no sea un tipo de raza equina conocida, podemos decir que destaca con creces en disciplinas como la doma clásica, el ecuestre general y el salto.
Como muy bien su nombre indica su origen está datado en Ucrania. Destaca a su vez por ser uno de los caballos con mayor calidad, esto se puede comprobar por su gran trabajo en múltiples disciplinas, destacando en todas ellas.
Se podría decir que su altura llega a alcanzar los 1,70 metros de alzada. Sin embargo, su pelaje no presenta mucha variedad cromática, no saliendo del alazán, el bayo y el color negro. Respecto a su temperamento, resulta ser de una de las razas más tranquilas y con facilidad a la hora de entrenar. También se podría decir que es uno de los equinos con más disposición a la hora de trabajar.
El caballo ucraniano cuenta con unas portentosas extremidades, un gran plano y largo dorso y un lomo bastante profundo y amplio. Su cabeza, resulta estar muy bien proporcionada en todos los ámbitos junto con unos ojos dotados de gran expresividad y sentimiento. Su cuello es recto y largo junto con una cruz prominente.
Este tipo de raza se data de un criadero ucraniano, la cual se trasladó más tarde a otros lugares de cría del país. Este caballo tuvo su origen en el cruce de un Purasangre durante años para darle mayor calidad a la raza. El objetivo era cubrir las múltiples demandas de caballos deportivos de su época. Se dice que tuvo su primer reconocimiento después de que concluyese la Segunda Guerra Mundial, en un criadero conocido como Dnipropetrovsk.